Todos tenían algo que resolver, pero se dejaron llevar por el deseo.

Todos tenían algo que resolver, pero se dejaron llevar por el deseo" es un compendio de seis relatos: el primero describe todo lo que lleva mi nombre, y los otros cinco están dedicados a seis varones y sus nombres. Entre estos textos ficcionados y falsas biografías, aparecen con humor las grietas que suponen los vínculos humanos, el peso de los nombres que llevamos y todo lo que se escribe con ellos: la crianza, la dominación, la domesticación, el cuidado, el control y finalmente la pregunta que atraviesa todas las historias: ¿Esto es amor? Este libro nace como una forma de articular cosas que alguna vez vi. Escribo sobre esos nombres, apodos o sobrenombres de hombres que escuché o inventé y que no pude olvidar. Escribo sobre todo lo que cada uno de ellos arrastra y guarda consigo: DIABLO: el nombre que un hombre eligió para sí mismo y que exige que todos pronunciemos; CHIPRE: la palabra a la que un perro respondió y que terminó siendo su nombre; APARTAMENTERO: el apodo que le di a un hombre que vivía de la empresa del amor; MOI: el apodo con el que una niña llamaba a su tío; MAXI: el nombre que una niña de cinco años escogió, para el hijo que un día iba a tener.