La Desilusión : una interpretación de dos novelas de Tomás González

La desilusión puede confundirse con la resignación o con el pesimismo. La lectura atenta de Primero estaba el mar y Los caballitos del diablo de Tomás González me permite afirmar que este sentir es solo un escepticismo en una dosis adecuada. La desilusión es una condición necesaria para encontrar un lugar de plenitud, sin olvidar el sentido crítico de la existencia. El resultado de esa pesquisa puede asociarse a un momento de elación o a un concepto de paz, pero debe entenderse no como un estado resuelto y definido de las cosas, sino como una posición tomada frente al conflicto irresoluto y permanente que es la vida.